Por Hugo Iván Garrido.
Efectivamente no hay gente mala, hay gobiernos malos y pueblo open-dejado (abiertos al supuesto cambio) vivimos en un país de actores y simulacros, donde co-habitan juntos fieras y mansos.
En una esquina los dictadores, los sin-verguenzas, los impostores, los defraudadores, los tramposos, los cínicos, los poderosos y mezquinos gobernantes representantes, de la otra, los agachones, los conformistas, los marginados, los humillados, los vulnerables y adormilados gobernados, aquí conviven el hombre mas rico del mundo, los mas de 50 millones de pobres y una clase media que resulta ser la mas aplastada, esta carece de identidad, desprecian sus raíces e imitan en todo al país vecino, pa sentirse bien "cool y ados" mas "in" menos prietos y mas "blank y ados"; coronamos las hazañas de los tranzas, de los asesinos, de los ladrones de cuello blanco, de los lava-dineros, de los borrachos, de los pederastas, violadores y seudo-religiosos disfrazados, aceptando una y otra vez que aquí no pasa nada, que ¡Así es México chingao! Aplaudimos el circo de los políticos, las telenovelas, teletones, las competencias deportivas amañadas, los juegos de las elecciones, por su puesto ya arreglados y programas tarados de los medios de comunicación masiva controlados, trabajamos en tierra de los narcos, de los violentos, de los patrones sin valores, del gobierno abusador, engañador y descarado, usamos todo tipo de servicios que nos dan de segunda mano, pa taparle el ojo al macho, nos dicen que ahí se fueron los gastos, sin ningún reclamo, aceptamos sus instituciones inser-viles, cachando como perros hambreados las migajas del pan que nos tiran todos los años con sus miserables salarios, pero aun así, dicen los acarreados "ah-web-oh!!!, viva México cabrones!!! vivan los tiranos!!!..."
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