Desde que el Congreso Nacional Indígena, junto con el EZLN, lanzó la propuesta de un Concejo Indígena de Gobierno, representado a su vez por una vocera indígena, las reacciones han sido diversas y se han discutido en distintos tonos y planos.
Sin embargo, y lamentablemente, me parecen preocupantes las respuestas, los análisis y las reacciones que han venido desde la llamada izquierda institucional. El día 15 de octubre del año pasado López Obrador escribió al respecto que el ELZN estaba siendo incongruente pues antes habían llamado a no votar y ahora proponía lanzar una candidata independiente a la presidencia de la república. En más de una ocasión, AMLO también ha acusado al EZLN de contribuir directa e indirectamente al fraude de 2006.
Al respecto me parece importante aclarar muchas cosas. En primer lugar, en vez de buscar enemigos fantasmas a los cuales echar la culpa de su fracaso, la izquierda institucional ya debería haberse dado cuenta de los errores que ha cometido desde hace años, y que le han costado credibilidad y confianza. (Una pista: A muchos de los que nos hemos sentido decepcionados de ustedes nos parece una total aberración que los nuevos cuadros y asesores del partido sean ex-priístas cuya corrupción y manejo vicioso están comprobados.) En segundo lugar, el EZLN jamás ha llamado a votar o no votar. Ellos llaman a resistir, a luchar y a organizarse. En tercer lugar, no es sólo el EZLN, y no es sólo Marichuy. Es el CNI, apoyado por el EZLN; y es un Concejo Indígena de Gobierno, representado por una mujer vocera indígena, ya que las formas colectivas de la política del abajo no caben en las formas de la política de arriba.
Al respecto, el “intelectual” orgánico de MORENA (nótese comillas) John Ackerman, se ha burlado de la propuesta. Sus argumentos parten de una concepción más que reducida del zapatismo y plantean una falsa pregunta. Ackerman dice que el asunto se debate en saber si la propuesta es para visibilizar la lucha de los pueblos o para tronar a López Obrador. El ego del señor Ackerman, junto con el de AMLO y el de la izquierda institucional no alcanza a caber en México.
L@s compañer@s lo han dicho claramente. Se trata de escuchar al México de abajo, al más olvidado, al que los partidos sólo ven como votantes en potencia. Se trata de rehilar la esperanza, de resistir al despojo y a la invasión de tierras comunales por parte de las transnacionales apoyadas por el Estado. Se trata de escuchar, de aprender, de no olvidar. Se trata de frenar la maquinaria de muerte que no permite la vida de los pueblos y de sus comunidades.
En definitiva, compañeros de MORENA, ¡NO SE TRATA DE USTEDES!
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Imagen tomada de "El Peje Lagarto Blogspot"
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