Julio Gálvez.
El reciente Primer Informe de Gobierno del Gobernador Menchaca ha generado una serie de críticas y comparaciones con prácticas políticas del pasado, específicamente con el PRI. Los observadores han señalado similitudes notables que han planteado interrogantes sobre la dirección y el enfoque del nuevo liderazgo estatal.
Uno de los puntos más destacados de crítica ha sido el influyentismo que marcó el evento. Al igual que en épocas pasadas del PRI, solo un selecto grupo de privilegiados parecía tener acceso preferencial a los primeros lugares del informe. Este enfoque excluyente recuerda a una era en la que solo los bien conectados podían participar en eventos gubernamentales de alto perfil.
Además, la presencia de la clase política y los llamados "fifís" en la celebración del año de gobierno del Gobernador Menchaca ha causado revuelo. La ausencia de los aspirantes de Morena a la presidencia de la República en el evento, en contraste con la asistencia de exgobernadores priistas como Alfredo del Mazo, Francisco Olvera y Manuel Ángel Núñez Soto, ha avivado las críticas. Estos exgobernadores han sido objeto de cuestionamientos por presunto enriquecimiento súbito durante sus mandatos, lo que arroja dudas sobre la integridad de la clase política en Hidalgo.
En un estado donde la política parece orientarse más hacia la aspiración personal que hacia el bienestar del pueblo, estas similitudes con el pasado del PRI son motivo de preocupación. Sin embargo, es fundamental recordar que, al final del día, son los ciudadanos quienes tienen la última palabra en cuanto a la evaluación de las acciones de Menchaca durante su primer año de gobierno.
Más allá de las críticas y las comparaciones con el pasado, lo que realmente importa es el impacto de las políticas y acciones gubernamentales en la vida de los hidalguenses. Los ciudadanos tendrán la oportunidad de expresar su opinión a través de los mecanismos democráticos, y es en esa voz colectiva donde se encuentra el poder para el cambio verdadero y la mejora en el estado de Hidalgo.
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En la foto del artículo vemos al senador Cesar Cravioto (cercano a Sheinbaum), con la senadora ex priista, ahora del PVEM, Nuvia Mayorga (cercana a Chong).
