#Opinión | Jorge Montejo
La reciente detención de César Román Mora Velázquez, excontralor del gobierno de Omar Fayad en Hidalgo, ha sacudido el panorama político del estado. Capturado en Miami, Florida, por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Mora Velázquez enfrenta acusaciones por su presunta participación en la denominada “Estafa Siniestra”, un esquema de corrupción que habría desviado más de 520 millones de pesos mediante contratos fraudulentos y empresas fachada durante la administración de Fayad. Su localización fue posible gracias a la adquisición de una lujosa propiedad y un vehículo de alta gama en Miami, lo que llamó la atención de las autoridades estadounidenses . El gobernador actual, Julio Menchaca, ha señalado que la información proporcionada por Mora Velázquez podría ser crucial para desentrañar la red de complicidades en este caso de corrupción.
Paralelamente, la exsecretaria de Finanzas, Jessica Blancas Hidalgo, también enfrenta señalamientos por presuntas irregularidades durante su gestión. La Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) detectó observaciones por más de 59 millones de pesos en contratos relacionados con servicios de consultoría, arrendamiento de equipos y desarrollo de plataformas digitales, muchos de los cuales carecen de documentación comprobatoria. Blancas Hidalgo, quien actualmente reside en Houston, Texas, ha sido instada a solventar estas observaciones; de lo contrario, podría enfrentar acciones legales. El gobernador Menchaca ha enfatizado que no se trata de una persecución política, sino de un compromiso con la legalidad y la transparencia en la administración pública.
