Jorge Montejo
¡Buenas noticias para Miguel Ángel Osorio Chong! El PRI, ese viejo barco que parecía hundirse bajo el peso de tantos traidores, por fin se ha vaciado de indeseables. ¿El motivo? Pues que todos, absolutamente todos los que tenían la más mínima lealtad negociable ya brincaron a Morena. Ahora sí que el PRI está más puro que nunca… aunque, claro, también más solo.
Osorio Chong, debe sentirse muy triste al ver que el maestro se quedó sin alumnos. Sus fieles discípulos, aquellos a los que formó con esmero en las artes del lado oscuro de la fuerza se han cambiado de bando. Se fueron, lo abandonaron, y peor aún… se vendieron al partido que tanto despreciaban: Morena. ¡Qué decepción!
Esos fieles e inteligentes acólitos de ayer, ya están cómodamente instalados en la 4T, donde ahora se declaran fervientes seguidores de la “transformación”. Gargamel, Napoleón, Marco Rico y compañía ya no son un problema, porque están demasiado ocupados tratando de quedar bien con Morena.
Y con la casa vacía y libre de traidores, porque los traidores de todos partidos ya están en Morena, pues qué mejor momento para valorar un regreso. Total, el PRI necesita urgentemente a alguien con experiencia que impulse nuevos perfiles desde las sombras. Porque ahí si, la experiencia y las estrategias del Sith Chong deben ser muy interesantes de aprender.
Así que ahí está, observando, esperando, como todo buen estratega. ¿Volverá triunfante al PRI? ¿O se quedará disfrutando el espectáculo desde las sombras?
