#Meme | Jorge Montejo
En Hidalgo, la educación ha alcanzado un nuevo nivel de surrealismo: ahora tenemos a Gargamel, el brujo diabólico parece que en lugar de atrapar a los pitufos, está más interesado en manipularlos políticamente.
Gargamel —quien sueña con enriquecerse con magia negra en Hidalgo— ha comenzado a mover sus piezas en la vida real. Como buen brujo del engaño, poseído por el espíritu de Osorio Chong, ha sabido camuflarse y cambiar de bando, pasando a Morena sin perder su esencia. En días recientes, se ha reunido con diversos aspirantes, haciéndoles ver —entre líneas y sonrisas de conjuro— que él es “el mero mero bueno”, el que aún reparte bendiciones, candidaturas… y quizá también maldiciones. Porque en la política hidalguense, nada desaparece: solo cambia de disfraz.
Gargamel —quien sueña con enriquecerse con magia negra en Hidalgo— ha comenzado a mover sus piezas en la vida real. Como buen brujo del engaño, poseído por el espíritu de Osorio Chong, ha sabido camuflarse y cambiar de bando, pasando a Morena sin perder su esencia. En días recientes, se ha reunido con diversos aspirantes, haciéndoles ver —entre líneas y sonrisas de conjuro— que él es “el mero mero bueno”, el que aún reparte bendiciones, candidaturas… y quizá también maldiciones. Porque en la política hidalguense, nada desaparece: solo cambia de disfraz.
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Pd. Busca cambiar con un hechizo el género de mujer a hombre en la próxima elección.
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