El presidente Andrés Manuel López Obrador atajó las críticas que le llovieron después de anunciar que Petróleos Mexicanos (Pemex) se encargará de construir la refinería de Dos Bocas, bajo la supervisión de la Secretaría de Energía (Sener), luego de declarar desierta la licitación en la que participaron cuatro empresas, una de las cuales se retiró y las otras por presentar ofertas y plazos por encima de lo estimado y por el gobierno.
En su conferencia de prensa mañanera en el Salón Tesorería del Palacio Nacional, donde estuvieron presentes un grupo de madres de familia que más tarde fueron homenajeadas, el mandatario aseguró que la refinería estará lista en mayo de 2022 y que producirá 300 mil barriles diarios.
López Obrador descalificó luego las críticas. Aseguró que tienen su origen en la oposición que hay ante el cambio de la política económica que lleva a cabo su gobierno, en sectores que siempre han sido privilegiados por la corrupción.
Antes de cuestionar, dijo, “sólo pido que me den la oportunidad de demostrar que sí se pueden hacer las cosas.
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