La tragedia provocada por las recientes lluvias en el norte de Veracruz ha encendido las alarmas dentro de la Universidad Veracruzana (UV), donde estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud reportaron la desaparición de 192 compañeros y el fallecimiento de dos más, tras el desbordamiento del río Cazones.
De acuerdo con los testimonios de los propios alumnos, las clases no fueron suspendidas pese a las advertencias por el mal clima, lo que habría impedido que varios lograran ponerse a salvo.
“Algunos vivían cerca del río y no pudieron salir a tiempo. Desde el martes no sabemos nada de ellos. Nos sentimos solos”, expresó una de las estudiantes afectadas.
Las lluvias torrenciales causaron severos daños a la infraestructura en varios municipios de la huasteca veracruzana. Comunidades de Tlachichilco permanecen incomunicadas, mientras que en Álamo Temapache se logró rescatar a grupos de docentes y universitarios que quedaron aislados durante días.
Ante la falta de información y apoyo institucional, los estudiantes han convocado protestas pacíficas en diferentes regiones de la UV, con el objetivo de presionar a las autoridades universitarias y al gobierno estatal para que se intensifiquen las labores de búsqueda y rescate.
Las movilizaciones, anunciaron los organizadores, se realizarán en los próximos días en los principales campus de la universidad. “Queremos que se escuche nuestra voz y que no se minimice lo que está pasando”, señalaron.
