GRUPO HIDALGO SEÑALADO POR CORRUPCIÓN.


Por Alonso Quijano.

De acuerdo con información del periódico Reforma, un puñado de empresas constructoras propiedad de empresarios hidalguenses cercanos a Miguel Ángel Osorio Chong han visto la prosperidad en el actual sexenio.

En cinco años, nueve constructoras hidalguenses han obtenido por lo menos 63 contratos que suman más de 2 mil 560 millones de pesos.

Los contratos millonarios han sido entregados por funcionarios cercanos al actual Secretario de Gobernación. 

Se trata de las constructoras Alvarga Construcciones, Kouro Desarrollos, Demovial, Construcciones y Terracerías Gocatsa, Piram, Itrio Arquitectos, Gromac Construcciones, Grupo Xamay de Desarrollo y Grupo Constructor Tulancingo.

Los contratos han sido otorgados por la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), principalmente por su delegación en el Estado de Hidalgo.

Ambas dependencias tienen una característica en común: desde enero de 2013 son dirigidas por ex funcionarios del Gobierno de Osorio Chong en Hidalgo.

La CDI es dirigida por Nuvia Mayorga, política hidalguense que durante la Gubernatura del actual titular de la Segob se desempeñó como Secretaria de Finanzas, en septiembre de 2012 tomó posesión como diputada federal por el principio de representación proporcional y, el 11 de enero de 2013, fue designada por el Presidente Enrique Peña Nieto como directora general de la Comisión encargada del desarrollo de infraestructura para la población indígena del País.

El titular del Centro SCT en Hidalgo es Gerardo Salomón Bulos, un funcionario cuya carrera comenzó en el Gobierno del priista Manuel Ángel Núñez Soto -en el que se desempeñó como director de Obras Públicas en el Municipio de Actopan-, y escaló durante la Administración de Osorio Chong.

De acuerdo con su currículum, entre 2005 y 2011 desempeñó diversos cargos en la Secretaría de Obras Públicas, Comunicaciones y Transportes de Hidalgo -director general de Comunicaciones, Director de Conservación de Carreteras y subsecretario-, de la que llegó a convertirse en su titular. El 24 de enero de 2013, fue designado delegado de la SCT en la entidad por el Secretario Gerardo Ruiz Esparza.

El Centro SCT de Puebla es otra instancia que ha entregado contratos a estas constructoras. Éste es dirigido por Raúl Salvador Aguirre, ex Secretario de Educación de Hidalgo durante el sexenio de Osorio Chong.

A partir de 2013, estas nueve empresas hidalguenses -que hasta antes del arribo de Nuvia Mayorga y Gerardo Salomón Bulos al Gobierno federal participaban sólo en licitaciones locales, ganaban contratos por pequeñas cantidades o no recibían adjudicación alguna- comenzaron a recibir importantes contratos de dependencias federales y a desarrollar obras de infraestructura en diferentes estados del País.

En lo que va de la actual Administración federal, han obtenido, en su conjunto, 63 contratos que suman más de 2 mil 560 millones de pesos.

De ellos, 167.6 millones de pesos de pesos fueron adjudicados por la CDI y 2 mil 392 millones por la SCT.

Modus operandi

La adjudicación de contratos a estas constructoras se ha llevado a cabo mediante un esquema que permite evitar la asignación de obras mediante adjudicación directa, un mecanismo que, por sí mismo, genera suspicacias: convocan a licitaciones públicas en las que participan hasta una veintena de empresas; sin embargo, sólo unas cuantas son consideradas solventes, entre éstas las presentadas por dichas empresas.

Dos ejemplos: en la licitación LO-009000997-N20-2013 para la modernización a 4 carriles del proyecto carretero México-Pachuca-Villa de Tezontepec, en Hidalgo, participaron 27 empresas, de ellas sólo cinco propuestas fueron consideradas "solventes": las presentadas por Grupo Constructor Diamante, Piram, Adrián Monter Lugo, Demovial y Grupo Constructor Tulancingo. El contrato por cerca de 42 millones de pesos fue adjudicado a este último.

Un año más tarde, la SCT repitió el mecanismo: emitió la convocatoria de la licitación LO-009000999-N176-2014 para la construcción del Distribuidor Vial El Minero en la carretera México-Pachuca-Actopan, también en Hidalgo.

En el concurso participaron una decena de constructoras, pero la SCT consideró solvente sólo la propuesta de Itrio, por lo que el contrato por más de 74 millones de pesos le fue adjudicado.

Otro esquema utilizado para beneficiar a estas constructoras es la invitación a cuando menos tres empresas. Así, al menos dos de los invitados a participar en las licitaciones son integrantes de este grupo de empresas hidalguenses.

La licitación LO-00900097-N28-2013 para la instalación de alumbrado público, guarniciones y trabajos faltantes sobre la carretera estatal Progreso-El Tephé -en los municipios de Progreso de Obregón, Chilcuautla e Ixmiquilpan- se resolvió mediante este procedimiento.

En el proceso participaron H&P Constructora, Electromecánica Morec, Construcciones y Excavaciones Ensástiga y Piram. El contrato por más de 9.5 millones de pesos fue adjudicado a ésta última.

La licitación LO-009000997-N001-2015 para la realización de trabajos de conservación periódica del tramo Venta de Carpio Pitula de la carretera Venta de Carpio-Tulancingo, en Hidalgo, también fue resuelta mediante invitación a cuando menos tres personas.

En ella participaron Persa Construcciones y de nuevo Construcciones y Excavaciones Ensástiga y Piram. El contrato por 7.8 millones de pesos fue adjudicado a Piram.

De acuerdo con Compranet, de los 64 contratos por más de 2 mil 560 millones de pesos adjudicados entre 2013 y el primer semestre de 2017 a las nueves constructoras "consentidas" de Osorio Chong, 50 fueron asignados por licitación pública y las 14 restantes por invitación.

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Con información del periódico Reforma.