La tecnología y la tradición se dan la mano gracias a Gabriela Salas, ingeniera mexicana que ha logrado que el náhuatl llegue a millones de personas a través de Google Translate. Su objetivo no termina ahí: también trabaja con el maya y planea integrar lenguas como el mixteco y el zapoteco, buscando preservar los idiomas que forman parte del patrimonio cultural de México.
Además de su trabajo en lenguas, Gabriela aplica su conocimiento en el área de inteligencia artificial para la salud mental. Ha desarrollado aplicaciones capaces de detectar riesgos de depresión y conectar a los usuarios con especialistas, y ha diseñado sistemas que apoyan en la detección y tratamiento de la leucemia, combinando ingeniería y medicina de manera innovadora.
Con la mirada puesta en el futuro, Gabriela sueña con crear un Centro de Recuperación de Lenguas Indígenas, un espacio donde se protejan y revitalicen los idiomas que representan la identidad de México. Su labor es un ejemplo de cómo la ciencia, la tecnología y la tradición pueden trabajar juntas para preservar las raíces culturales y mejorar la vida de las personas.