EL MEXICANO ANTE EL POSIBLE CAMBIO DE NOMENCLATURA DE ESTADOS UNIDOS MÉXICANOS


Por Armando Nieto

El posible cambio de nombre de Estados Unidos Mexicanos a simplemente el de México es un tema que en lo particular no obedece a que factores históricos, sociales o económicos hayan incidido, como muchas personas lo han discutido y abordado en los días que se dio a conocer esta noticia, sino simplemente es un cambio acorde a como la mayoría de las personas se refiere a México, especialmente al mexicano,  en otras palabras el supuesto cambio obedece más a un punto pragmático y Cosmopolitan que otra cosa, cambio que en lo particular no tiene mayor relevancia o trascendencia, sin embargo es motivo de este articulo porque este simple tópico causo revuelo en las redes sociales, con diversas y variadas opiniones al respecto, algunas de ellas encausadas a que con esto se trasgredía y vulneraba la historia, la patria y otras tantas hasta la democracia e incluso la soberanía, todas estas sin fundamento, inverosímiles e irrelevantes.

La realidad es que si se llegase a concretar la reforma del presidente Calderón no tiene mayor trascendencia el cambio de nombre del país, es simplemente un mero cambio en la nomenclatura, más no así en su sistema, además comparto la idea si se llegase a concretar, ya que la mayoría de los mexicanos no nos referimos a nuestro país como Estados unidos Mexicanos, o que provenimos o somos de los Estados unidos Mexicanos, simplemente decimos que somos de México o somos mexicanos, cosa que también respecto a sintaxis está mal escrita, ya que debería de ser; somos mejicanos o somos de Méjico, con la palabra “j” en lugar de la “x”, ´pero esto es mera costumbre que tenemos arraiga de años, de hecho desde que nos imparten la educación primaria nos enseñan a escribir de esta manera el nombre de nuestro país, pero esto no es tan importante, (si es que lo es) como el cambio de nomenclatura de nuestro país, pero pese cual sea la decisión del congreso de la unión, este cambio es simplemente para facilitar y afirmar por así decirlo el nombre de nuestro país en estos tiempos, nada más y nada menos.