EL DUOPOLIO SE AFILA LAS GARRAS PARA LAS ELECCIONES DE 2015

Editorial

Según Jorge Alcocer, especialista en temas electorales, las elecciones de 2015 costarán aproximadamente 37 mil 500 millones de pesos y advirtió que si el costo de estas sigue creciendo a este ritmo, en las elecciones del 2018, podemos llegar hasta 50 mil millones de pesos, contando con que el INE tiene cero credibilidad en materia de gastos de campaña.

Ante este situación, es lamentable lo que nuestros políticos gastan en elecciones cuando en otros rubros hay falta de escuelas, hospitales, medicinas, desempleo, pobreza, marginación e inseguridad. La ciudadanía se pregunta ¿Con ese dinero cuantos centros educativos se abrirían, para que el pueblo deje de vivir en la ignorancia en la que esta sometida?

La ciudadanía se pregunta ¿Por qué no invierten ese dineral en la generación de empleos  para que existan más fuentes de trabajo bien remuneradas, ya que dicen los jefes de familia que así no venderían su voto tan fácilmente y por supuesto serian unas elecciones creíbles, con representantes que el pueblo verdaderamente elija y no con el “dedazo blindado”. 

Sin embargo, en el mundo real, las arcas del gobierno se abren fácilmente para la compra del voto, y las instituciones tienen que buscar sobre todo esa revolución que se viene arrastrando por el desconocimiento de los programas sociales cuando se presentan personajes que son unos verdaderos “alquimistas electoreros". 

Por ejemplo, el INE anteriormente el IFE, es una institución encargada del control democrático, pero lamentablemente ha demostrado favoritismo, algunas veces ha sido de forma sutil y otras de forma burda, pero sobre todo ha sido omiso a las denuncias en materia de gastos de campaña, por lo que gracias a esta situación, esta autoridad carece de credibilidad, ya que se presta al servicio del poderoso y ahora que las elecciones se acercan no será la excepción, toda vez que el duopolio, una vez más se convertirá en el titiritero que mueve las marionetas a su conveniencia. 

Dicen los especialistas que aunque el IFE cambió de nombre a INE, "continuará siendo la misma gata pero revolcada" y parece ser que la ley seguirá siendo violada, mientras los grandes traficantes de votos pisotean a los ciudadanos a través del gran derroche de recursos, porque en esta época electoral, los políticos gastaran millones de pesos en promover su imagen, mientras el pueblo se las ve negras para comer.

Es de esperarse que el INE protegerá  privilegios y las evasiones fiscales de los más ricos en las elecciones por venir, sin embargo, el pueblo seguirá ciego y enajenado por la televisión porque desafortunadamente esta no muestra la realidad y solo presentan programas en los que le hacen creer al ciudadano que vive en “el país de las maravillas” y así el de a pie nunca abrirá los ojos ni reflexionara sobre el futuro.