2014, Un año de Mentiras.
Por más que el gobierno aprueba y aprueba reformas, la gran pregunta sigue siendo: ¿Por qué no han funcionado? La respuesta es sencilla: los intereses particulares de algunos políticos siempre se disfrazan de reformas legaloides que se reducen a publicidad impulsada por Televisa y Tv Azteca. Al parecer los mexicanos estamos gobernados por pura demagogia, ya que los resultados están muy lejos de lo esperado, debido a que el 2014 estuvo repleto de mentiras:
1. La reforma Educativa: Esta reforma de educativa no tuvo nada… el gobierno encarcelo a Elba Esther Gordillo con la intención de recuperar el gran negocio de la educación y aunque todo haya sido un show, la realidad es que estamos peor que antes en materia educativa, la educación de miles de niños mexicanos ahora es un objeto de consumo y la calidad de esta en este 2014 no aumento nada, cada día las escuelas de nuestros hijos están peor.
2. La reforma laboral: Esta reforma que estuvo impulsada por el gobierno prianista desde el 2012 nada tiene de laboral, ya que México en la actualidad tiene los peores indices de desempleo de la historia, nadie ve por ningún lado más y mejores empleos, todo lo contrario, la delincuencia ha aumentado a raíz de la gran miseria que se vive, pero eso si, el salario mínimo es tan miserable que la mano de obra poco a poco se parecerá a la de los chinos.
3. La reforma Fiscal: Esta reforma termino siendo una decepción, primero se dijo que los alimentos tendrían IVA generalizado, pero al final el gobierno termino echándose para atrás para taparle el ojo al macho, ya que todo lo disfrazo a través de la creación de otros impuestos como el de la gasolina que será aplicado a partir del 1 de enero. Como siempre el pobre ciudadano será el que pagará más y las empresas como Televisa gozaran de miles de mecanismos para que el SAT les devuelva cantidades millonarias.
4. La reforma política: Esta reforma de democrática no tiene nada, una vez más el PRI le tomo el pelo al PAN y al PRD, por lo que seguramente en el 2018, la oposición se dará cuenta que de nada sirvió el servilismo tan evidente que le tienen al Partido Revolucionario Institucional. Ahora los diputados, senadores y presidentes municipales se podrán reelegir, pero ¿De que sirve la reelección si las instituciones electorales en México (se llamen como se llamen) son una filial del partido de los dinosaurios?
5. La reforma energética: La privatización del sector energético quizás sea lo que más repercusión tenga en el bolsillo de los ciudadanos, al parecer el 40% del dinero del presupuesto que provenía de PEMEX, ahora será para las empresas extranjeras que vengan a nuestro país a explotar el petróleo, mientras que los mexicanos dejaremos de ver esas ganancias reflejadas en el gasto público ¿Como le hará el gobierno para llenar ese boquete fiscal? Aprobando nuevos impuestos como el aumento del 3% a la gasolina que entrara en vigor a partir de enero. Si embargo, la gran reforma de Peña Nieto, esta estancada por las malas decisiones en materia de seguridad, toda vez que los inversionistas le pusieron el freno a las inversiones por la ingobernabilidad que se respira en México.
6. La reforma en telecomunicaciones: Esta reforma, lo único que hizo fue enriquecer más a Televisa, ya que se han puesto infinidad de candados, para que otras compañías puedan entrar al mercado de las telecomunicaciones en México. Al parecer le pusieron trabas a Carlos Slim, todo con la intención de proteger a la televisora de la mentira, socio comercial del partido de los dinosaurios.
6. En materia de seguridad mejor ni hablamos, simplemente no se ha hecho nada, México no tiene rumbo, los grupos de auto defensa inundan el país en respuesta a la falta de organización que existe dentro de los cuerpos policiacos. Al parecer se rumoran cambios para el 2015, pero ni con la policía de mando único podrán con la delincuencia, el decálogo del Presidente no es más que una propuesta de forma, pero no de fondo. Parece ser que continuaran aparentando.
¿Qué nos espera para el 2015?
Se fue el 2014, ocurrieron hechos extraordinarios; sin embargo, aunque los medios de paga señalen que no hay crisis, la realidad es que el PRI ha tenido un pésimo gobierno, ya que ante el panorama que vivimos en la actualidad, resulta preguntarnos ¿Para qué sirvieron las reformas estructurales? Evidentemente para nada, seguimos igual o peor, vivimos en un país con miles de muertos, la dictadura perfecta ha vuelto: corrupción, nepotismo, influyentismo, crisis económica, distractores, pobreza y narcotráfico enmascarado. Lamentablemente “los privilegiados” cada día se hacen más ricos y poderosos, mientras el pueblo sólo percibe que los impuestos suben, los trámites en las presidencias municipales son más engorrosos, la canasta básica está por las nubes y los mismos de siempre nos siguen gobernando por medio de apariencias.
En 2015 deberán haber cambios urgentes en el gabinete del Presidente Peña, sobre todo para combatir la pobreza. La clase política debe entender que la gente está cansada del PRI y más ahora que este partido no ha entregado ni un solo resultado. Aunque las instituciones y Televisa digan que vivimos en el mundo de las maravillas, a la gente ya no se le engaña tan fácil, las redes sociales y las nuevas tecnologías le han abierto la mente a la ciudadanía. El Revolucionario Institucional debe renovarse, dejar la demagogia, ser incluyente y regresar a las políticas sociales que tantas glorias le dieron a este partido.
Peña Nieto, deberá cumplir sus promesas rápido, porque de otra forma, se va a echar encima a toda la nación y el efecto rebote se reflejará en las elecciones de 2015 y 2018, ya que no habrá forma de tapar a través de las instituciones electorales el fraude del PRI. La ciudadanía esta cansada de los mismos rostros de la política, a pesar de que este partido negocie con la aposición las derrotas del PAN y el PRD, la inconformidad seguirá creciendo de forma descontrolada.
El gobierno no puede mentirnos, hay alarma social, México está al borde de que estalle una revolución, los grupos de auto defensa están preparados para la guerrilla, sino es que esta ya inició. La clase política debe reaccionar, en las filas del "nuevo PRI" no hay el suficiente talento para revertir las cosas, los políticos priístas de moda carecen de preparación, México ya no es el mismo de la época de Díaz Ordaz, los que dirigen este país tienen que aprender a ver esta nueva realidad, nuestra nación está cambiando y el estereotipo de gobernante que hoy tenemos ya no funciona.
Cambios a la vista ante la ingobernabilidad que se vive en México.
Durante la semana pasada, el periodista Raymundo Riva Palacio reveló en su columna "Estrictamente Personal”, titulada "5 de enero de 2015,” los cambios en el gabinete del presidente de la República Enrique Peña Nieto, los cuales fueron maquinados durante su gira por Asia, por motivo de la crisis de Iguala, Guerrero.
A unos días de que inicie el año electoral, ya se sabe por diversas fuentes del inframundo, que el presidente Enrique Peña Nieto va a realizar cambios en su equipo y estrategia. Un grupo de asesores lo analizó mientras se encontraba de gira por Asia, y concluyó que había que cambiar piezas importantes en el gabinete, y en el rumbo. La desaparición de los normalistas de Ayotzinapa detono la inconformidad nacional. En los primeros días de la crisis, hubo 381 manifestaciones en el país. Las imágenes de ingobernabilidad produjeron que los inversionistas europeos decidieran no traer dinero a México en 2015, por lo que ante esta situación el presidente Peña Nieto tenía que dar un golpe de timón creíble.
El modelo de presidencia tripartita para la toma de decisiones, se acabó. Al secretario de Hacienda, Luis Videgaray, el hombre de todas las confianzas del presidente durante casi una década, se dice que lo enviarán como embajador ante la Casa Blanca. En sustitución, Peña Nieto nombrará a un financiero reputado en el mundo, con la credibilidad que requiere para este momento donde han perdido la fe en el proyecto del presidente: Agustín Carstens, actual gobernador del Banco de México.
La otra pata del modelo peñista en el gobierno, Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación, dicen que también será removido. Al perder Peña Nieto a Videgaray como una de sus cartas sucesorias para 2018, necesitará “proteger” a Osorio Chong, ya que el resurgimiento de los grupos de auto defensa en Michoacan evidencian el fracaso de su modelo de seguridad, por lo que el hidalguense podría convertirse en candidato a diputado federal plurinominal por su estado natal y como relevo podría llegar a bucarelí, nada más y nada menos que Manlio Fabio Beltrones, otro presidenciable que se afila las garras.
De igual forma se comenta en las afueras del infierno que la otra opción de los asesores de Peña, es convertir a la Secretaría de Gobernación en Secretaría del Interior, con Medina Mora al frente, y designar como nuevo fiscal general a un abogado panista. Es la receta del expresidente Ernesto Zedillo, quien para recuperar la credibilidad en la PGR nombró a Antonio Lozano Gracia. De cuajar este modelo, la operación política pasaría al jefe de la Oficina de la Presidencia, que operaría como jefe de gabinete como sucede en Estados Unidos, donde el actual responsable, Aurelio Nuño, saldrá hacia una posición en el gabinete. Llegaría a su lugar un político con experiencia, cuyo nombre es desconocido.
Conforme a lo anterior, el silencio que se respira en varias Secretarias del Gobieno Federal nos hace suponer que al inicio del año 2015, Peña Nieto hará varios cambios en su gabinete, la crisis generada por el caso Ayotzinapa es insostenible y sus principales operadores en lugar de unir a los priístas han hecho todo lo contrario, le han abierto frentes por todos lados al Presidente de la República.
Los cambios son necesarios, los problemas han rebasado al gobierno y las críticas internacionales como la que hizo el presidente de Bolivia Evo Morales, encendieron los focos rojos de la prensa, ya que el mandatario calificó al caso Ayotzinapa como un resultado del modelo fallido que se ha implementado para combatir el narcotráfico, toda vez que parece, que en México la delincuencia se encuentra por encima del Estado.
Desde el olvido
Alonso Quijano.
Cambios a la vista ante la ingobernabilidad que se vive en México.
Durante la semana pasada, el periodista Raymundo Riva Palacio reveló en su columna "Estrictamente Personal”, titulada "5 de enero de 2015,” los cambios en el gabinete del presidente de la República Enrique Peña Nieto, los cuales fueron maquinados durante su gira por Asia, por motivo de la crisis de Iguala, Guerrero.
A unos días de que inicie el año electoral, ya se sabe por diversas fuentes del inframundo, que el presidente Enrique Peña Nieto va a realizar cambios en su equipo y estrategia. Un grupo de asesores lo analizó mientras se encontraba de gira por Asia, y concluyó que había que cambiar piezas importantes en el gabinete, y en el rumbo. La desaparición de los normalistas de Ayotzinapa detono la inconformidad nacional. En los primeros días de la crisis, hubo 381 manifestaciones en el país. Las imágenes de ingobernabilidad produjeron que los inversionistas europeos decidieran no traer dinero a México en 2015, por lo que ante esta situación el presidente Peña Nieto tenía que dar un golpe de timón creíble.
El modelo de presidencia tripartita para la toma de decisiones, se acabó. Al secretario de Hacienda, Luis Videgaray, el hombre de todas las confianzas del presidente durante casi una década, se dice que lo enviarán como embajador ante la Casa Blanca. En sustitución, Peña Nieto nombrará a un financiero reputado en el mundo, con la credibilidad que requiere para este momento donde han perdido la fe en el proyecto del presidente: Agustín Carstens, actual gobernador del Banco de México.
La otra pata del modelo peñista en el gobierno, Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación, dicen que también será removido. Al perder Peña Nieto a Videgaray como una de sus cartas sucesorias para 2018, necesitará “proteger” a Osorio Chong, ya que el resurgimiento de los grupos de auto defensa en Michoacan evidencian el fracaso de su modelo de seguridad, por lo que el hidalguense podría convertirse en candidato a diputado federal plurinominal por su estado natal y como relevo podría llegar a bucarelí, nada más y nada menos que Manlio Fabio Beltrones, otro presidenciable que se afila las garras.
De igual forma se comenta en las afueras del infierno que la otra opción de los asesores de Peña, es convertir a la Secretaría de Gobernación en Secretaría del Interior, con Medina Mora al frente, y designar como nuevo fiscal general a un abogado panista. Es la receta del expresidente Ernesto Zedillo, quien para recuperar la credibilidad en la PGR nombró a Antonio Lozano Gracia. De cuajar este modelo, la operación política pasaría al jefe de la Oficina de la Presidencia, que operaría como jefe de gabinete como sucede en Estados Unidos, donde el actual responsable, Aurelio Nuño, saldrá hacia una posición en el gabinete. Llegaría a su lugar un político con experiencia, cuyo nombre es desconocido.
Conforme a lo anterior, el silencio que se respira en varias Secretarias del Gobieno Federal nos hace suponer que al inicio del año 2015, Peña Nieto hará varios cambios en su gabinete, la crisis generada por el caso Ayotzinapa es insostenible y sus principales operadores en lugar de unir a los priístas han hecho todo lo contrario, le han abierto frentes por todos lados al Presidente de la República.
Los cambios son necesarios, los problemas han rebasado al gobierno y las críticas internacionales como la que hizo el presidente de Bolivia Evo Morales, encendieron los focos rojos de la prensa, ya que el mandatario calificó al caso Ayotzinapa como un resultado del modelo fallido que se ha implementado para combatir el narcotráfico, toda vez que parece, que en México la delincuencia se encuentra por encima del Estado.
Desde el olvido
Alonso Quijano.
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