LOS DESECHOS TÓXICOS DEL PRI



Por Jorge Montejo.

La expectación en torno al nuevo gabinete de Omar Fayad crece en un sector importante de la sociedad, cada grupo político se encuentra impulsando a sus aspirantes favoritos a través de los medios oficiales de comunicación; sin embargo, el Gobernador electo cometería un gran error al rodearse de los mismos políticos de siempre, esos “desechos tóxicos” que han arrastrando al PRI-Gobierno al abismo.

En efecto, si el gobernador electo Fayad, quiere tener los mismos resultados que ha tenido el Presidente Peña, pues que coloque en su gabinete a los mismos políticos que han fracasado en el gobierno federal y que ocasionaron las derrotas del PRI por su pésimo trabajo en la administración pública. 

La ciudadanía envío un mensaje de hartazgo muy claro en las pasadas elecciones, Fayad recibe un estado dividido por el mismo dinosaurio autoritario que se disfrazó de oposición y que ahora busca imponer un gabinete conformado por los políticos de siempre, lo cual generará aun más inconformidad social, mayor división y control sobre el nuevo gobierno.

Los hidalguenses esperan un cambio radical después del comunicado del presidente del PRI estatal, al reconocer que "habían comprendido el mensaje que la ciudadanía les envió en las pasadas elecciones"; sin embargo, Beltrones renuncio y en Hidalgo no paso nada, por lo que el gabinete de Fayad demostrará si realmente el partido tricolor habla con la verdad o solo esta nadando de muertito para imponer en el nuevo gobierno a los operadores que perdieron más de la mitad del estado. 

No olvidemos que antes de la elección del 5 de junio, el PRI dijo que habrían candidaturas ciudadanas, que rescatarían a los mejores elementos de la sociedad para las elecciones de 2016 y nada de eso ocurrió. Decepcionaron a la ciudadanía seleccionando muy malos candidatos, situación que los llevó a la peor derrota auto-ocasionada de su historia.

Ante esta situación, lo mejor que puede hacer Fayad, es conformar a un gabinete ciudadano integrado por gente capaz, alejando del gobierno a los falsos líderes y aduladores que solo neutralizarán al nuevo gobernador colocándolo en una burbuja de cristal para controlar su administración como lo hacen en el gobierno federal al encapsular al Presidente Peña Nieto en un mundo rosa alejado de realidad.

Si Omar Fayad quiere comenzar con el pie derecho, deberá reconciliarse con la ciudadanía inconforme y no con la clase política que se disfrazó de oposición en las pasadas elecciones, ya que, aunque se retrate con los triunfadores, la realidad es que estos políticos de sonrisa delatadora no obtuvieron el triunfo gracias a su gran liderazgo o capacidad, ganaron por la coyuntura, la inconformidad social, el hartazgo y el voto de castigo que arrastra el PRI-Gobierno.

Por lo anterior, el futuro gobernador de Hidalgo, no debe mal entender el mensaje que  la ciudadanía envió en las pasadas elecciones,  la gobernabilidad y la paz social no la encontrará en los grupos políticos, caciques, medios institucionales de comunicación y líderes de rancho de toda la vida.

La gobernabilidad la generará la propia ciudadanía, ya que las personas más talentosas de México hoy en día no están enraizadas en el gobierno o en algún partido político; se encuentran en el sector ciudadano, en las universidades, en los centros de investigación, en los medios independientes, en el deporte, en el arte, en las ONGs, en sus empresas, y estas personas sí tienen la capacidad para generar paz social y prosperidad en el Estado de Hidalgo.

No debemos olvidar que los políticos que hoy dividen a la clase política, unieron a México en su contra para el 2018.