Revocación de mandato y voto de castigo son herramientas del pueblo hidalguense en una democracia.



Jorge Montejo.

El pasado viernes 12 de marzo, el Dr. Julio Gálvez fue invitado al círculo de estudio Pedro María Anaya de Morena, donde compartió su experiencia en la defensa de los derechos de la gente en una democracia. Durante su intervención, Gálvez destacó dos asuntos jurídicos que han impactado en la política hidalguense en los que le ha tocado contribuir, derivado del movimiento democrático de 2018 con el triunfo del presidente Andrés Manuel López Obrador.

El primero de estos asuntos fue la redacción de la petición de desaparición de poderes en 2018. En ese momento, Morena requería un abogado constitucionalista y había obtenido la mayoría en el poder legislativo hidalguense, pero el entonces gobernador priista Omar Fayad intentó ejercer control sobre el legislativo mediante violencia y avasallamiento de algunos diputados. Ante esta situación, se redactó el documento de desaparición de poderes; sin embargo, lo utilizaron para llegar a un acuerdo político entre Monreal y Fayad, negociando la gubernatura de Hidalgo para entregarla a Menchaca.

De esta forma, la mafia del poder hidalguense ha buscado desesperadamente proteger sus privilegios obtenidos gracias al capitalismo de cuates en Hidalgo; sin embargo, esta estrategia permitió controlar al gobierno de Omar Fayad, quien traicionó al PRI para convertirse en el primer gobernante de la 4T en esta entidad federativa por medio de un acuerdo político.



Otra estrategia jurídica destacada por Gálvez fue cuando el grupo universidad intentó (al igual que ahora intenta el gobierno o ciertos actores del gobierno de Menchaca) avasallar a la izquierda y a las bases de Morena en el Poder Legislativo. Esto fue impedido mediante el rechazo de la iniciativa de este grupo que buscaba terminar con la rotatividad en la junta de gobierno entre los tres partidos con mayor votación obtenida en la pasada elección, evitando así (porque difícilmente podrá controlar el congreso un solo grupo político) que un grupo se apoderara de un poder en la búsqueda de la gubernatura de Hidalgo y sus propios intereses.

Gálvez, expresó que esa coyuntura permitió desde la ciudadanía impulsar diversas iniciativas históricas en el Congreso de Hidalgo como la del aborto, la prohibición de popotes, plásticos y unicel, así como decenas de reformas en favor de los derechos de las mujeres, que los diputados de morena no presumen como de ellos, porque se dedicaron a venderse, mientras algunos trabajaban.

Estos casos ejemplifican cómo la mafia del poder siempre buscará asaltar el poder, avasallando a la gente de abajo en la búsqueda de sus propios intereses, pero ahora la ciudadanía manda en Hidalgo y puede limitar todo tipo de abuso mediante acciones constitucionales como lo es la revocación de mandato, impulsada por el propio presidente AMLO.

Lo anterior, porque en la actualidad, las bases de Morena han pedido un voto de castigo contra aquellos oportunistas y chapulines que no representan los ideales y valores de la 4T, demostrando el poder del ciudadano en la defensa de la democracia, ya que ahora el pueblo manda, expresó Gálvez.