El Senado de la República aprobó con 107 votos a favor la llegada de un grupo de Fuerzas Especiales del Ejército de Estados Unidos a México, con el propósito de llevar a cabo un entrenamiento conjunto con la Secretaría de Marina (Semar). El programa de capacitación se llevará a cabo del 17 de febrero al 28 de marzo en el Centro de Capacitación y Adiestramiento Especializado de Infantería de Marina, ubicado en San Luis Carpizo, Campeche.
Durante este período, elementos del Comando de Operaciones Especiales del Ejército estadounidense trabajarán junto a la Unidad de Operaciones Especiales de la Semar en ejercicios avanzados de combate terrestre, aéreo y marítimo, así como en tácticas de operaciones especiales.
El senador Rolando Rodrigo Zapata Bello, de la Comisión de Marina, destacó que este tipo de entrenamientos fortalecen la capacidad operativa de las fuerzas armadas mexicanas, aunque enfatizó la importancia de mantener la autonomía estratégica del país.
Por otro lado, la senadora Lilly Téllez, del PAN, defendió la cooperación con EE.UU., argumentando que no compromete la soberanía nacional y podría beneficiar la lucha contra el crimen organizado. También cuestionó la falta de acuerdos bilaterales más amplios para enfrentar a los cárteles.
Este tipo de colaboración no es nueva. En abril de 2024, un grupo de 11 militares estadounidenses participó en un ejercicio de entrenamiento conjunto con el Ejército mexicano, como parte de los esfuerzos para mejorar la coordinación en entre ambas naciones.
El tema sigue generando debate en la política mexicana, pues mientras algunos sectores consideran que este tipo de cooperación es clave para fortalecer la seguridad nacional, otros advierten sobre la necesidad de mantener el control total de las estrategias militares sin depender de fuerzas extranjeras.