HAMPA Y POLITICA, “MINAS DE ORO”

Por Julio José Gálvez Méndez
Nota publicada el 20 de junio de 1999

La pobreza extrema, la desconfianza, la crisis no solo económica, sino de confianza es a la que se enfrenta la población, los marginados, los de la extrema pobreza, no así, los grupos privilegiados, se enriquecen a costa de los pobres, los que luchan por el “pan nuestro de cada día”, dilema constante, prioridad… hampa y política “minas de oro”.

Se esta viviendo: hampa y política se han convertido en verdaderas minas de oro, el hampa ha logrado a través de a impunidad lograr grandes fortunas, con la industria del robo de vehículos, los asaltos a tráileres, taxis, casas habitación, restaurantes, transeúntes, etc., donde en ocasiones las autoridades no hacen nada. El crimen organizado es obra de todos los días, se ve como asesinan entre dos o tres personas sin importar la edad, ya que van desde los 9 hasta los 70 y tantos años. La cadena de asesinatos, en todos y cada uno de los municipios de este gran estado está a la orden del día.

Por otra parte vemos como la mercapolitica, es cada día más rica esta comprometida con la mercapolitica-delincuencia, estas dos van de la mano, dejando a los que luchan todos los días por llevarse algo al estomago con las manos vacías, muchos dicen que entre los políticos y los delincuentes día con día existe menos oportunidad de sobrevivir, ya que los ciudadanos tienen que pagar impuestos, rentas, etc., y lo poco que ganan muchas veces se lo roban en la calle.

La ciudadanía se pregunta ¿Cuándo llegara un funcionario que verdaderamente se preocupe por nosotros los de abajo? ¿Cuándo será el día que podamos salir a la calle sin temor a la delincuencia? Y lo peor de todo, es que se preguntan si algún día los políticos dejaran de empobrecer a este querido estado, y que en lugar de auto enriquecerse se preocupen por los importantes temas de miseria extrema, inseguridad, injusticia, crisis económica, y las más graves “incredulidad y desconfianza”, es lo que primero deberán sembrar en todos y cada uno de los olvidados.