EL PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN HUNDIDO EN LA CORRUPCIÓN

Por Maria Gil
Analista Político

Después de que se dio a conocer información sobre el supuesto tráfico de influencias de magistrados y jueces federales en favor de Juan José Rojas Cardona, conocido como el Zar de los Casinos, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) ordenó la suspensión inmediata, sin goce de sueldo, de dos magistrados de circuito y un juez de distrito.

Según información del diario Reforma, el CJF señaló que la decisión respondió a las formalidades que pudieran garantizar las condiciones para el adecuado desarrollo de la investigación iniciada a partir de hechos públicos presuntamente constitutivos ilícitos.

Los integrantes del Poder Judicial que fueron suspendidos son Eduardo Ochoa Torres, del Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil en Monterrey; José Manuel Rodríguez Puerto, del Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal y del Trabajo en Tamaulipas; y Javier Rubén Lozano Martínez, juez segundo de distrito en materia administrativa de Monterrey.

Eduardo Ochoa Torres, quien en los pasados días expresó estar abierto a la investigación del CJF, además de que supuestamente intercedió con jueces y magistrados a favor del Zar de los Casinos, también realizaba viajes a Las Vegas junto con Francisco Salazar Arreozola, apoderado legal y encargado de las relaciones públicas de Juan José Rojas Cardona.

Diversos medios de comunicación aseguran que el juez Rubén Lozano, fue suspendido porque fue conocedor de por lo menos tres amparos promovidos en 2012 y 2013 por Entretenimiento de México (Emex), empresa del Zar de los Casinos, a la que otorgó diversas suspensiones, contra inspecciones, clausuras y demás sanciones determinadas por la Secretaría de Gobernación.

Es importante mencionarse que después de que había estallado el escándalo, el juez desechó dos de los tres amparos, incluido uno en el que Emex interpuso un incidente de violación a la suspensión luego de que Gobernación le revocara el permiso para operar 50 casinos el 1 de abril.

Por último, el magistrado Rodríguez Puerto -de quien uno de sus hijos era apoderado legal de Emex para los litigios de su casino en Cancún cuando el magistrado despachaba en un tribunal colegiado de Chetumal- aseguró que el presto el teléfono desde donde se grabaron las llamadas.

Ante la corrupción que se vive en la mayoría de los tribunales federales del país, resulta preguntarnos sobre la calidad moral del Poder Judicial de la Federación, ya que con el regreso del PRI al poder se ha hecho evidente el control político que trata de ejercer el ejecutivo federal sobre algunos Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Consejo de la Judicatura Federal, siendo lamentable el grado de independencia judicial que se vive en la actualidad.

De igual forma, es importante mencionarse, que ante las redes de corrupción que se evidenciaron con el caso del "Zar de los Casinos", podemos concluir que el Poder Judicial de la Federación está podrido en su interior, Ministros, Jueces y Magistrados realizan su trabajo muy alejados de garantizarle justicia a los ciudadanos toda vez que se han convertido en sirvientes de la política, por desgracia para los mexicanos, los juzgadores que 
no son corruptos y que en verdad le han aportado prestigio a la judicatura federal, son forzados a salir sin explicación alguna adscribiéndolos en plazas de castigo, para cederle el lugar a todas aquellas personas que ingresan a la judicatura federal como instrumentos de los hombres de neogicos ilícitos.

Es lamentable la época que vive el Poder Judicial de la Federación, hoy más que nunca hace falta una reforma en materia de justicia, la realidad ha superado a nuestros juzgadores o mejor dicho la corrupción, el nepotismo, la venta de plazas y los intereses políticos, ya que para la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Consejo de la Judicatura Federal, la política y los negocios están por encima de la legalidad.