Hoy en día, el PRI enfrenta una inconformidad social como nunca antes se había visto en la historia de este país, los políticos priístas no representan a nadie dentro de la sociedad. A todas luces el partido tricolor ha perdido el apoyo de las televisoras, de los principales medios de comunicación, de los líderes de opinión, de los empresarios más fuertes de México, de la sociedad en general y hasta de los mismos priistas.
Muestra de lo anterior, lo podemos observar en el Estado de México, donde a pesar de que la maquinaria electoral priista se encuentra funcionando a todo vapor con la compra del voto y el apoyo descarado del gabinete federal, la campaña de Alfredo del Mazo ha sido un desastre, simplemente no logra levantar ante el desprestigio de su primo el Presidente, la falta de apoyo de Eruviel y el crecimiento imparable de la candidata de Morena, Delfina Gómez.
¿Pero esto que tiene que ver con Hidalgo?
Mucho, a Omar Fayad hace un año, le sucedió algo similar, el PRI de Olvera le dio la espalda, de pronto cambiaron las rutas del TuzoBús, se generó inconformidad social, la policía reprendía manifestantes, la plaza independencia se re-inauguro, los parquímetros, los puentes se caían y en general Hidalgo estaba hecho un caos por las decisiones del gobierno y las imposiciones de diversos candidatos a presidentes municipales que no eran los más fuertes dentro del tricolor, pero que "estratégicamente fueron elegidos para perder".
Lo anterior viene al caso porque hace unos días, el ex gobernador de Hidalgo, Francisco Olvera hizo declaraciones para El Sol de Hidalgo y manifestó que Omar Fayad es “una gente capaz que conoce muy bien el estado; se ha desempeñado en muchas áreas y conoce varias actividades. De igual forma dijo que que Fayad tiene las relaciones, la fuerza y la capacidad para hacer un buen gobierno y, por supuesto, al irle bien al gobierno, le va bien al estado”.
Estas declaraciones salieron a la luz justo cuando en diversos medios se filtro la información de que Juan Carlos Martínez Dominguez, brazo derecho y coordinador financiero de la campaña del actual gobernador de Hidalgo, es acusado de corrupción en virtud de que durante la pasada administración, le compraron a su empresa Celular Millenium, 15 mil tabletas de origen chino, las cuales –según Televisa– fueron reportadas con un costo de $5,800, cuando en realidad tienen un valor de $800.
Ante estos señalamientos, el empresario Juan Carlos Martínez, defendió su posición y aclaró que no hay nada ilegal, ya que la misma Auditoria Superior del Estado de Hidalgo en su momento revisó el proceso de compra, el cual puede ser corroborado por la ciudadanía en documentos públicos, ya que las tabletas en realidad costaron $800 y no $5,800 como se quiere hacer creer a la ciudadanía.
Todo este reality show después de que el gobierno de Olvera se despachara con la cuchara grande en materia de notarias, concesiones de taxi, licitaciones, y Omar Fayad evidenciara diversos actos de corrupción de la anterior administración en la SEPH, Radio y Televisión de Hidalgo y en la Secretaría de Salud, además de que ya inició el proceso de renovación del PRI, por lo que sería interesante preguntarle al actual presidente estatal si en los comités municipales se impondrán lacayos de Olvera, Osorio o Fayad, porque no vaya a suceder que la inconformidad social que generé el tricolor con sus imposiciones obstruya al actual gobierno, como sucedió hace un año.
.png)
