EL PRI LE QUITA CANDADOS A MEADE.


Por María Gil.

La noche del miércoles 9 de agosto de 2017, el PRI aprobó reformas a sus estatutos para permitir la postulación de un ciudadano simpatizante para la Presidencia de la República en 2018.

¿Y eso qué significa? Pues que el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, que no tiene afiliación al tricolor, podría ser candidato presidencial del PRI en 2018 sin la necesidad de militar en ese partido; sin embargo, los militantes con 10 años de afiliación también podrán participar. 

A mano alzada, los 520 delegados que participaron en la mesa de estatutos avalaron la propuesta que presentó el exdiputado federal José Ramón Martel, a quien José Antonio Meade nombró como su asesor especial durante su gestión en la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).

De este modo, en el artículo 181 de los estatutos del PRI, se estableció un penúltimo párrafo, en el que precisa la posibilidad de que los ciudadanos simpatizantes con prestigio y fama pública puedan ser postulados por el partido.

“Conforme a lo dispuesto en la ley de la materia, la Comisión Política Permanente que corresponda podrá aprobar la participación en el proceso de la postulación de candidaturas a cargos de elección popular a ciudadanas y ciudadanos simpatizantes, cuando su prestigio y fama pública señale que se encuentran en un nivel de reconocimiento y aceptación y, en consecuencia, en condición competitiva para ganar”, precisa el párrafo aprobado por los delegados.