EL REGRESO DE GERARDO SOSA.


Por Jorge Montejo.

No se cansan los grandes políticos del PRI de decir que habrá unidad en Hidalgo; sin embargo, en realidad continuan las prácticas de desprestigio, monopolización del poder, divisiones y bloqueo de distintas fuerzas políticas, situación que le abrirá varios frentes al Revolucionario Institucional de cara a las próximas elecciones de 2018, quizás le estén fracturando el Estado a Omar Fayad con otros fines. 

Lo anterior, se hace evidente con el conflicto entre el Grupo Universidad y el Gobierno de Hidalgo, con el tema del contralor interno que el Congreso le quiere imponer a la UAEH, ya que indirectamente impulsarán la candidatura por el Frente Ciudadano por México de Gerardo Sosa Castelán al senado, fenómeno social que bien o mal, podría ser un parteaguas para que en Hidalgo exista un cambio democrático en un futuro no muy lejano.

La ciudadanía ha criticado en diversas ocasiones a Gerardo Sosa por su pasado al frente de la extinta Federación de Estudiantes de UAEH; sin embargo, el rompimiento del Grupo Universidad con el PRI-Gobierno gracias al tema del contralor interno, esta siendo bien visto por la ciudadanía en virtud de que este grupo se esta convirtiendo en uno de los pocos contrapesos del actual gobierno.

El tema de la autonomía de la UAEH, es un tema complejo, este derecho no es una conquista reciente de las universidades, existen precedentes en Italia, Francia, Inglaterra, España e incluso en México. Por más de nueve siglos, reyes, dictadores y todo tipo de gobernantes han tratado de controlar a las comunidades científicas, educativas y culturales, a través de diversos mecanismos y no han podido lograrlo, de hecho ha sucedido todo lo contrario, los grupos que defendieron la autonomía universitaria se legitimaron socialmente en los países donde surgieron este tipo de conflictos. 

Por lo anterior, es importante mencionar que el conflicto jurídico le dará legitimación al grupo universidad, ya que la presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso de Hidalgo, "la jurista" María Luisa Pérez Perusquía, esta confundiendo que un órgano constitucional autónomo descentralizado como lo es la Comisión de Derechos Humanos o el Instituto Estatal Electoral, recibe un tratamiento muy distinto al que debe recibir una universidad que obtiene su autonomía del artículo 3 de la Constitución. 

El Congreso de Hidalgo, esta perdiendo de vista que existen diversos tipos de autonomías en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por lo que la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo no puede ser tratada como cualquier órgano constitucional autónomo, su autonomía es más amplia y tiene otras características. No es lo mismo la autonomía de un municipio, la autonomía del IEEH, la autonomía de la Comisión de Derechos Humanos y la autonomía de la UAEH.

En este orden de ideas, el hecho de que el ex rector de la Universidad Autónoma de Hidalgo, Gerardo Sosa Castelán, se encuentre defendiendo la bandera de la autonomía universitaria, podría significar su reconciliación con los sectores de la población que durante años lo criticaron por prácticas del pasado, ya que el grupo universidad cuenta con la estructura necesaria para garantizar lo que miles anhelamos, la democracia en Hidalgo.

Con la bandera de la autonomía universitaria y la cargada del sistema en contra del grupo universidad, es posible la candidatura de Sosa Castelán al senado en un mundo donde contamos con un PRI sumamente desprestigiado y con varios frentes de batalla abiertos, los cuales podrían unirse en contra de un enemigo en común.