EL FUEGO AMIGO DE CHONG.


Por Jorge Montejo.

La fractura en las altas cúpulas está en su climax. Y el “fuego” arrecia, reclamando el espacio de poder que le arrebataron al presidente Peña.

Hace poco más de dos meses en este semanario advertimos de la increíble alianza rumbo al 2018 que estaba por gestarse entre el Partido Encuentro Social (PES) y Morena.

Increíble, porque para nadie es un secreto que el PES es hechura y propiedad de Miguel Angel Osorio Chong y a simple vista sería incompatible con los intereses de Andrés Manuel López Obrador. Muestra de ello lo fue la renuncia de Alejandro González Murillo de ese partido, quien ahora busca ser senador por medio del partido Nueva Alianza en coalición con el PRI para deslindarse de Morena.

Sin embargo, aunque Osorio Chong trate de aparentar lo contrario en las visitas de José Antonio Meade a Hidalgo, la realidad es que su estructura de políticos y periodistas pagados se encuentra operando en favor de Andres Manuel López Obrador.

Por lo anterior, el llamado “fuego amigo” esta muy vivo en el PRI a pesar de que, en su papel de apagafuegos, Enrique Ochoa trate de funcionar de manera burda desde la dirigencia, pues no alcanza a controlar el golpeteo interno entre los principales personajes que aprovechan la práctica de la filtración para mandar sus misiles disfrazados de investigación periodística, tal y como sucedió en Chihuahua con Javier Corral, ya que diversas fuentes señalan que su gobierno recibió apoyo de la SEGOB para armar el golpe por el posible desvío de recursos de la Secretaría de Hacienda a campañas del tricolor. 

En este orden de ideas, las lealtades en el PRI no están tan firmes, sobre todo después de que, desde Los Pinos, Enrique Peña Nieto decidió que el candidato presidencial del revolucionario institucional fuera José Antonio Meade.

A partir de entonces, las molestias y los golpeteos internos en el PRI, sobre todo entre algunos personajes, se han venido manifestando en varios escándalos entre los cuales podemos mencionar la presencia de Miguel Ángel Osorio, Manlio Fabio Beltrones, Ivonne Ortega, Jorge Carlos Ramírez Marín, Eruviel Ávila, Enrique Ochoa Reza, César Camacho, Emilio Gamboa, entre otros.

Ese golpeteo interno en el PRI también se manifestó desde las cloacas de los Pinos en la decisión de la candidatura para gobernador de Yucatán. El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, quien es lacayo de Osorio Chong, se sentía seguro candidato, pero grande fue la sorpresa cuando anunciaron que el candidato sería Mauricio Sahuí Rivero.

Lo anterior viene al caso, porque en Hidalgo, al más puro estilo del ex secretario de gobernación, se filtraron las listas de candidatos a diputados y senadores en redes sociales para tratar de legitimar a sus lacayos por encima de la autoridad del Gobernador del Estado, Omar Fayad Meneses; sin embargo, puede ser que les espere una gran sorpresa a los que ya se sienten seguros en la curul, incluso hasta dentro de la oposición...