Los hechos violentos ocurridos en el Congreso de Hidalgo, me recuerda el proceso de desaparición de poderes que se presentó en Hidalgo en tiempos de Lozano Ramírez y Rojo Lugo, derivado de un conflicto social.
La desaparición de poderes es un proceso legal contemplado en el artículo 76 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, mediante el cual se declara que por distintas causas (políticas o sociales), han dejado de existir como tales los poderes públicos de un estado, por lo que el Senado de la República, interviene para designar nuevos poderes que sustituyan a los desaparecidos.
Lo anterior viene al caso porque, hoy en día, el PRI enfrenta una inconformidad social como nunca antes se había visto en la historia de este país, los políticos priístas no representan a nadie dentro de la sociedad. Con el triunfo de MORENA, a todas luces el partido tricolor ha perdido el apoyo de las televisoras, de los principales medios de comunicación, de los líderes de opinión, de los empresarios más fuertes de México, de la sociedad en general y hasta de los mismos priistas.
Muestra de lo anterior, lo pudimos observar en las pasadas elecciones, en donde a pesar de que la maquinaria electoral priista trabajó a todo vapor con la compra del voto y el apoyo descarado del gabinete federal, la campaña de Meade fue un desastre, simplemente no logró levantar gracias al desprestigio del Presidente, desprestigio generado desde Bucareli a lo largo del sexenio, ya que todos los problemas afectaban al titular del ejecutivo y nunca al súper secretario.
Por lo anterior, ante los conflictos que existen entre el gobierno de Fayad y el grupo universidad, es importante destacar que por ningún lado se han impuesto los acuerdos y el diálogo, pareciera como si no quisieran arreglarlo por más que el gobernador ha declarado lo contrario.
Pareciera que hay gente cercana a Omar Fayad, que solamente le está amarrando navajas con el grupo universidad para fracturar y dividir a su administración para no dejarlo gobernar y así no obtenga más poder.
En pocas palabras, ante el triunfo de MORENA, quieren controlar a Omar Fayad para que no desplace al todo poderoso de Hidalgo después de las derrotas electorales en las que participaron el grupo universidad.
.png)
