La desdolarización y el Nuevo Orden Mundial.



Julio Gálvez.

El secretario de Estado Antony Blinken ha reconocido, en términos eufemísticos pero significativos, el fin del orden unipolar en el mundo. Su declaración se produce en medio de un cambio geoeconómico fundamental que está remodelando la estructura global de poder. Este cambio no solo involucra la relación de Estados Unidos con otras naciones, sino también la creciente desdolarización y la búsqueda de "divisas duras" por parte de otros países.

Desdolarización Implícita.

A pesar de no mencionar explícitamente la desdolarización, la declaración de Blinken apunta a un mundo donde el dólar estadounidense ya no es la única moneda de reserva dominante. 

La dependencia de las materias primas y los recursos reales, en lugar de las divisas fiat, está emergiendo como una estrategia clave para la seguridad económica de las naciones. Esto desafía la supremacía del dólar como la moneda de referencia global.

El Rol de las Materias Primas.

La visión geoeconómica de Putin, destacada por el analista ruso Igor Danchenko, subraya la importancia de las materias primas como "divisas duras" que garantizan la seguridad económica y política de Rusia. 

Este enfoque en los recursos minerales como moneda de respaldo es una respuesta al debilitamiento de las monedas fiat y un signo de los tiempos cambiantes.

El Desafío de Estados Unidos.

La declaración de Blinken menciona desafíos como la competencia con poderes revisionistas, la guerra de Rusia en Ucrania, los esfuerzos de China para remodelar el orden mundial y el cambio climático. 

Sin embargo, la pregunta clave es cómo Estados Unidos, que ha dependido en gran medida de su influencia económica y financiera global, abordará esta nueva realidad. ¿Puede preservar su liderazgo desde una posición de fuerza mientras enfrenta desafíos económicos y geopolíticos significativos?

La Multipolaridad en Ascenso.

La Cumbre del G-77 + China en Cuba, con la participación de 134 países, subraya la dinámica emergente de un "Nuevo Orden Mundial del Siglo XXI". 

Este evento destaca la creciente multipolaridad en la que múltiples naciones buscan una voz más fuerte en los asuntos globales y una mayor autonomía económica. Estados Unidos se encuentra en un mundo donde su liderazgo indiscutible está siendo cuestionado.

Conclusión.

El mundo se encuentra en medio de una transformación geoeconómica y geopolítica de gran alcance. La desdolarización, la búsqueda de "divisas duras" y la multipolaridad son tendencias que desafían el antiguo orden unipolar. 

Cómo los países, especialmente Estados Unidos, se adaptarán a esta nueva realidad definirá el curso del "Nuevo Orden Mundial del Siglo XXI". La diplomacia y el diálogo serán esenciales en este contexto de cambio y competencia global.