Luego del decomiso de 1.4 toneladas de cocaína en Tula de Allende por la Fiscalía General de la República, (FGR), el mandatario estatal, Julio Menchaca Salazar, reconoció algún cartel de la delincuencia organizada, se encuentre inmiscuido.
Por años los gobiernos en Hidalgo se han referido a este tipo de acontecimientos como hechos aislados, y esta administración no era la excepción; sin embargo, tras el hallazgo de la droga se tuvo que reconocer la presencia de alguna célula delincuencial.