En Hidalgo, el que paga manda: De aduladores del PRI a porristas de Morena



#Opinión | Jorge Montejo

Como si fueran jugadores profesionales entrenados en el fino arte de la maroma, los medios de comunicación en Hidalgo han dado un salto mortal hacia atrás y dos piruetas adelante, pasando de ser aduladores oficiales del viejo PRI a entusiastas animadores de Morena. Con la misma facilidad con la que antes aplaudían cada ocurrencia del gobernador priista en turno, hoy corean y aplauden en tono guinda.

¿Qué cambió en los últimos años? Pues nada, salvo el color del dinero que alimenta los titulares. Esos mismos medios que décadas atrás vendían al PRI como el inventor de la rueda, hoy presentan a Morena como la última panacea. Y es que en Hidalgo la lealtad tiene precio, aunque eso sí, bastante accesible.

Ahora, aquellos medios que antes defendían la democracia priista (sí, esa democracia donde siempre ganaba el mismo) y aplaudían a rabiar los discursos vacíos, nos quieren convencer de que ellos siempre han estado comprometidos con “el cambio verdadero”. Ni Orwell pudo imaginar semejante capacidad de reinvención histórica.

De las notas rosas sobre el exgobernador Fayad y las alabanzas a Osorio Chong, hemos pasado a editoriales que ensalzan las virtudes transformadoras de Morena. Claro, todo con absoluta objetividad, independencia y compromiso ético. Y si alguien nota que los medios siguen exactamente igual, pues está claro: eso es pura casualidad.

En Hidalgo, la prensa local continúa siendo el mejor termómetro para saber quién firma los cheques. Porque aquí, más que informar, parece que lo importante sigue siendo la reproducción del boletín. Después de todo, la dignidad periodística puede esperar; la quincena no.

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P.D. Un periodista pierde su poder al someterse a un político.