La reciente decisión del banco de méxico de reducir su tasa de interés en 50 puntos base, dejándola en 8.50%, ya empieza a reflejarse en el mercado. En la más reciente subasta de valores, los bonos gubernamentales mostraron una baja en sus tasas, destacando los certificados de la tesorería (cetes) a 28 días, que registraron un rendimiento de 8.15%, es decir, 25 puntos base menos que la semana anterior.
El banco central dejó abierta la posibilidad de continuar con recortes similares en futuras reuniones, siempre que las condiciones inflacionarias lo permitan y que la política monetaria continúe en terreno restrictivo.
Analistas financieros anticipan que la tasa de interés de referencia podría cerrar el año en 7.75%, en línea con la moderación esperada de la inflación. El mercado ahora observa con atención los próximos indicadores económicos, que marcarán la pauta para las decisiones monetarias del resto del año.