
2 de noviembre de 2025
Existió una epoca en México donde lo que mas importaba no era el fisico de una persona sino la forma de gobernar y de marcar la ruta del gobernante en turno.
Cuando gano la presidencia Adolfo Ruiz Cortines dada su apariencia, que en realidad no era de un anciano pero en comparación con su antesesor Miguel Alemán Valdez éste realmente parecia su abuelito, no se hicieron esperar las mofas hacia su persona a lo que el respondia: “Fui electo para un cargo público mas no para ser un semental”.
Se suma también el caso de Gustavo Díaz Ordaz él mismo decía: “No tengo ángulo. Soy feo, así soy. Al Secretario de Gobernación no sólo se le debe tener respeto sino también un poco de miedo, es saludable para el país. Soy lo suficientemente feo como para que me tengan miedo”.
Díaz Ordaz era un personaje que carecía de carisma y su popularidad entre la población estaba por los suelos, así que la gente se divertía al ponerle apodos que hacían referencia a su físico. Algunos lo llamaban “tribilín” (en alusión al perro de caricatura de Walt Disney, Goofy), “chango” o “trompudo”.
Al mandatario le hacían muchas bromas por su poco atractivo físico y él no se quedaba callado. En una ocasión le dijeron que era bien sabido que los poblanos tenían dos caras, a lo que él contestó: “¿Ustedes creen que si yo tuviera otra usaría ésta?”. Los funcionarios presentes no supieron si reír o guardar silencio.
Los años pasan y sin duda las percepciones también, quiza por eso ahora la mercadotecnia fija nuevas tendencias para lograr conectar con las personas y por eso lo que antes se buscaba, talento puro, ahora para ganar una elección pareciera que se busca solo belleza y cero talento.
Enrique Peña Nieto fue candidato priista en dos ocasiones, en las elecciones para gobernar el Estado de México y después dio el saltó para ser el presidente federal, en ambas campañas para ganar el cargo público el cobijo de las mujeres fue evidente, tal fue el caso que en su presentación en el foro de la Expo Guadalajara, de marzo del 2012, hubo 3 mil mujeres.
Esas feminas que se daban cita cada que sabian de un mitin de Peña Nieto coreaban hasta casi perder la voz: “Nata con pan, nata con pan, Peña Nieto es mi galán”; “Enrique, amigo, ven, acércate, hazme un hijo”; “No seré la Gaviota, pero puedo ser tu Guajolota”; “Peña, bombón, te quiero en mi colchón”.
Tal era el deseo de posar junto a Peña Nieto que incluso las simpatizantes más aguerridas acusaban a otras de ya haber pasado y haberse tomado una foto con él; e intentaban llegar a un consenso para tomarse la foto y dejar a otras pasar.
Y es que en un país donde hay mas mujeres que hombres esclaro que la mercadotecnia logra una estrategia promocional para posicionar a un candidato frente a lo visceral que es tan solo el físico de la persona mas no su capacidad y trayectoria para gobernar.
Seis años perdidos frente a un personaje que solo mostro musculo atractivo mas no musculo encefálico.
Nuevamenta la historia se repite y ahora con otro personaje que emana de las filas del partido morena, él es nieto de Marcelino Garcia Barragan quien fuera secretario de la defensa justo en el año de 1968 crucial para la historia de México y mas al haber sido un militar de alto rango encargado del ejército.
Omar Garcia Harfuch muestra ser el “guapetón” del partido morena y posible elegido para suceder en la presidencia a Claudia Sheinbaum en el 2030 ya que podría repetirse la misma estrategía política que llevaran a cabo los priistas en su momento con Enrique Peña Nieto.
Se sustenta esta idea con las obtusas y poco sesudas declaraciones de la legisladora petista, Jessica Saiden quien aseguró que "millones y millones de mujeres" se imaginan acompañando al titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch.
Valiente y lamentable declaración puesto que el encargado de Seguridad y Protección Ciudadana tiene una gran deuda con los mexicanos, la violencia, muertes y desapariciones continuan y Omar Garcia Harfuch no ha logrado detener mas que los corazones y pensamientos de sus seguidoras, tal como sucedió con Peña Nieto en su momento y le sirvio para llegar a la presidencia.