DURMIENDO CON EL ENEMIGO: PRI-TELEVISA.



Por Pablo Martínez. 

Como es sabido el PRI y Televisa  nacieron de la mano, juntos los hermanos crecieron ayudandose hombro a hombro. Televisa dueña de los medios comunicación en México, por años nos lleno de basura televisiva y noticias manipuladas, creando ambientes erróneos a modo de favorecer el sistema. 

La televisora apostó por quedarse rezagada en la modernidad tecnológica, sin voltear a ver la llegada de las nuevas plataformas; paginas como Youtube nos dio a la población común posibililadades; las diversas plataformas en internet nos dieron acceso a nuevos modos de entretenimiento e información. Nos dieron la alternativa de tener acceso a mejores contenidos e información veras casi en tiempo real de acontecimientos que estaban sucediendo. 

Muy rápidamente Televisa, perdió credibilidad, la calidad en sus contenidos, hacían que más personas encendieran la computadora y apagaran el televisor. Este fenómeno tomo fuerza suficiente para crear movimientos como  #yosoy132 y Ayotzinapa, que nos mostró la cantidad de noticias falsas que pasaban por los noticieros, siendo el ejemplo claro la visita del presidente Peña Nieto a la Universidad iberoamericana mientras era candidato presidencial, modificando la versión real de los hechos, siendo así el surgimiento del citado moviendo #yosoy132. 

Poco a poco estas dos fuerzas, fueron perdiendo mucho poder, el PRI cada día perdía más simpatizantes con escándalos políticos, creando fuertes tensiones entre sus cúpulas por la perdida de poder y credibilidad. Empezó un gran hartazgo entre la población alimentada por las redes sociales que encontrarón un espacio para la expresión pública. 

En vísperas de la campaña presidencial para el 2018, el futuro se ve confuso, las encuestas son indecisas reflejando con esto el pensamiento popular. Pero como se demostró en años anteriores el peso de la llamada generación millenial o generación Y, cerca de catorce millones de nuevos votantes tendrán un peso importante en la elección presiendecial. 

Lo que el priismo no se ha dado cuenta, es que duerme con el enemigo, la relación socio cultural que hemos creado hacia ambas marcas es casi inquebrantable, la marca PRI-Televisa, lucha por un camino parecido, el de la credibilidad y el rescate de sus consumidores y votantes. 

Esta es una batalla de Caín y Abel, la pregunta empieza aquí, ¿quién será Caín y quién será Abel? Alguno de estos hermanos tienen que morir para el otro salga ganador, Televisa tiene que quitarse la estampa del PRI, para resurgir con mayor credibilidad y el PRI tendrá que quitarse el estigma de Televisa, si quiere seguir vivo en la elección, sabiendo que el acceso a información en plataformas de internet y redes sociales es fundamental para la victoria. 

Creo que ambas partes se dieron cuenta que estaban durmiendo con el enemigo, el punto importante aquí será saber ¿quien logrará mantenerse a flote?.