EL FISCAL A MODO.


Por Jorge Montejo.
17 de julio de 2018.

Después de que Javier Ramiro Lara Salinas, renunciara al cargo de Procurador General de Justicia del Estado de Hidalgo, el Congreso local designó como nuevo fiscal a Raul Arroyo, quien como Magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Hidalgo liberó a un entrenador de la Universidad de Fútbol del Club Pachuca, acusado de abusar sexualmente de un menor de seis años. 

Hoy, después de décadas de servilismo al poder político priísta, Raúl Arroyo ha sido premiado luego de que MORENA ganara la mayoría en el Congreso del Estado de Hidalgo, y posiblemente para proteger desde la procuraduria los intereses de los escombros del grupo Hidalgo, ya que ante el triunfo de AMLO existe la posibilidad inminente de que el gobierno de Fayad sea vigilado como el mismo López Obrador lo declaró durante su cierre de campaña en Pachuca, situación por la cual, el fiscal a modo debe blindar al gobierno local. 

¿O a caso Arroyo fue nombrado procurador por el bien de la procuraduría? 

Lo que el gobierno de Fayad no ha acabado de comprender, es que el PRI no perdió el Estado de Hidalgo por el grupo universidad o los extraordinarios candidatos de MORENA, sino por la gran inconformidad que existe en la sociedad (generada por actos de corrupción o hechos bochornosos como lo sucedido en el caso del niño agredido), la cual a su vez  es impulsada por los medios de comunicación que representan los intereses del pueblo y no de grupos políticos. 

Pero bueno a ver qué pasa con el fiscal a modo después de que sea evidenciado en cortes internacionales por la indebida aplicación de los derechos humanos de un niño de seis años que pidió justicia pero que no pudo acceder a ella por los intereses del Club Pachuca que se convirtieron en formalismos jurídicos a favor de los derechos humanos del sentenciado perdiéndose de vista los derechos de la victima. 

LOS HECHOS BOCHORNOSOS DE AGRESIÓN SEXUAL EN CONTRA DE UN MENOR DE SEIS AÑOS.

Para recordar quien es Raúl Arroyo, no debemos olvidar el bochornoso caso del niño de seis años que denunció por violación a su entrenador de la Escuela de Fútbol del Club Pachuca, a quien identificó y señaló directamente dentro del proceso penal, en donde además la perito en psicología de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo, dictaminó que el menor había sufrido un daño psicológico de origen sexual por esos hechos.

Es importante mencionar que los jueces de primera instancia, ante los hechos dictaron sentencia condenatoria en contra del entrenador, resolviendo conforme a los derechos humanos del niño, ya que le dieron mayor valor a la declaración del menor, quien hizo una imputación directa en el sentido de que en la institución a donde estudiaba le causaron un daño y que su profesor le había “tocado la colita y que había sentido dolor y miedo”, además de que, cuando sucedió eso “sentía una caca atorada que entraba y salía de su cuerpo”. Esta fue una declaración directa del menor en la que señaló como responsable a su profesor, en presencia de la defensa de su agresor y del conocimiento de todos y cada uno de los juzgadores.

Ante estos hechos y después de la apelación del sentenciado por sentirse inconforme con la sentencia de primera instancia, el entonces magistrado ponente de la Sala Penal de Apelaciones del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Hidalgo, Raúl Arroyo (ahora Procurador de Hidalgo), con la votación por unanimidad de sus compañeros magistrados, decidieron poner en libertad al sentenciado, bajo el argumento de que "el niño fue aleccionado para su declaración", además de que "no quedó debidamente probado en autos que los tocamientos del profesor fueran con una intención sexual", como textualmente lo cita en la sentencia. 

Sin embargo, el abogado del menor, Hans Christian Hernández Castillo, argumentó para este semanario que no cualquier tocamiento genera un daño psicológico en el ámbito sexual como lo dictaminó la perito oficial, por lo que los magistrados no tomaron en cuenta los Tratados Internacionales en materia de menores para darle mayor valor a la declaración del niño, tomando en cuenta su edad, su falta de educación sexual y el tiempo que ya pasó desde que ocurrieron los hechos (más de 1 año y 6 meses), por lo que ya preparan acciones ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos para evidenciar la podredumbre del aparato de justicia en Hidalgo.