
Alonso Quijano
El Tren Maya, una de las obras insignia del gobierno mexicano, ha estado envuelto en polémicas desde su concepción. Pero ahora, el proyecto no solo enfrenta críticas ambientales y sociales, sino que ha despertado alarmas en Estados Unidos, donde congresistas advierten que inversiones chinas podrían estar detrás de su financiamiento y construcción.
En una carta enviada al presidente Donald Trump, 35 legisladores republicanos expusieron su preocupación por el papel de China en la región y el impacto del cierre de Vulcan Materials, la empresa estadounidense que operaba en Yucatán y cuya cantera y puerto fueron ocupados por las fuerzas armadas mexicanas en 2022 bajo orden del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador. Según los congresistas, la administración de Claudia Sheinbaum analiza un “plan de manejo” para la zona, lo que podría beneficiar a compañías extranjeras, en especial chinas, a expensas de los intereses de EE.UU.
Empresas chinas y el Tren Maya: contratos millonarios y expansión en México
Si bien el gobierno mexicano no ha confirmado que el Tren Maya tenga financiamiento chino, empresas del gigante asiático han sido beneficiadas con contratos clave en la construcción de la obra. Entre ellas destacan:
• China Communications Construction Company (CCCC): Ganó contratos junto con empresas mexicanas para la construcción de tramos del Tren Maya. Esta empresa ha sido sancionada por EE.UU. debido a su participación en proyectos de infraestructura considerados estratégicos por China, en el marco de su Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI, por sus siglas en inglés).
• CRRC Corporation Limited: Fabricante de trenes de origen chino, que ha participado en licitaciones para el suministro de los convoyes del Tren Maya. Esta compañía también ha sido señalada por EE.UU. como un actor clave en la expansión del poder económico de China en América Latina.
• PowerChina: Empresa de infraestructura que ha firmado acuerdos en México y ha trabajado en proyectos de energía y transporte.
La creciente participación china en el sureste de México no es casualidad. La región tiene una posición estratégica, con acceso tanto al Golfo de México como al Caribe, lo que la convierte en un punto clave para el comercio y la logística en la región. La cercanía con EE.UU. y el potencial de conexión con otras inversiones chinas en América Latina han hecho que Pekín vea el Tren Maya como una oportunidad para consolidar su presencia en México.
China, Vulcan Materials y la advertencia de EE.UU.
Además del tema del Tren Maya, la carta de los congresistas denuncia el caso de Vulcan Materials, cuya cantera y puerto fueron cerrados y expropiados en favor del Estado mexicano. Los legisladores insisten en que esta medida perjudica a la infraestructura de EE.UU., ya que la empresa abastecía de materiales de construcción a varios estados del sur estadounidense, y advierten que la expropiación podría beneficiar a compañías chinas interesadas en la zona.
Por su parte, Washington teme que la expansión china en México no solo tenga implicaciones comerciales, sino también de seguridad nacional. La cercanía del Tren Maya con la frontera sur de EE.UU. y su posible conexión con otros proyectos estratégicos hacen que cualquier inversión china en la región sea vista con desconfianza por parte del gobierno estadounidense.
México, entre China y EE.UU.: ¿una decisión inevitable?
Con esta nueva advertencia de congresistas republicanos, la relación entre México y EE.UU. podría tensarse aún más si Trump regresa a la presidencia. Su administración ya ha sido hostil a las inversiones chinas en América Latina, y el Tren Maya podría convertirse en un nuevo frente de conflicto comercial y diplomático.
Si México insiste en abrir la puerta a inversiones chinas, el gobierno de Sheinbaum podría enfrentar represalias económicas, aranceles o incluso sanciones. La pregunta ahora es hasta qué punto está dispuesto el gobierno mexicano a desafiar a su vecino del norte para consolidar sus vínculos con China.