La ocurrencia se debió a su notorio protagonismo y su intención de salír en los medios de comunicación
Ricardo Montoya
Diana Deniss Martínez Sánchez, esposa de Andrés Velázquez al que apodaron como El Panda o el Andobas, Presidente del Congreso de Hidalgo, en su afán de protagonismo y ansias por llamar la atención de los medios de comunicación, según el portal Alcoholímetro Pachuca, tuvo la ocurrencia de compartir en redes sociales algunas fotos posando con armas de fuego ( en una se le ve con una pistola escuadra y en la segunda con un arma de alto poder con los oídos tapados con protectores de sonidos fuertes), vestida de negro, como sicaria (ojo, no estoy diciendo que lo sea).
Según Alcoholímetro Pachuca, Diana Deniss presumió estar en un curso de tiro al blanco con armas de fuego,imagenes que después bajó ante las burlas y comentarios negativos de los usuarios de internet que alcanzaron a verlas.
Aquí comparto las fotos que sacó Alcoholímetro Pachuca cuyos editores inclusive les colocaron su logo.
La pregunta es ¿qué importancia cree Diana Denisse el que la ciudadanía (que es representada por su marido en el congreso) sepa que ella entrena para poder volarle la cabeza a algún cristiano?
¿En qué le ayuda a su esposo el que ella aprenda a disparar y manejar armas de fuego de alto calibre? Pues de nada, pero es una más de las muchas ocurrencias de Diana Deniss para llamar la atención, parte de su narcisismo, de un injustificado delirio de grandeza.
Al menos de que Diana Deniss se esté adiestrando en el uso de armas de fuego para pedir chamba como granadera de la Policía Estatal o en la policía bancaria industrial (en la Secretaría de Seguridad Pública de Pachuca no , porque su marido Andrés Velázquez y el alcalde Jorge Reyes se caen mal mutuamente porque los dos, aunque son un par de ineptos y mediocres, quieren ser candidatos de Morena a la gubernatura en 2030), no tiene ninguna justificación haberse tomado esas fotos y menos aún haberlas compartido por redes sociales ya que solo muestran, por decir lo menos, frivolidad.
Tanto ella como Andrés Velázquez, desde que el buen Andobas primero obtuvo la diputación por el llamado Efecto Obrador y la gran popularidad de Claudia Sheinbaum y luego su injustificada designación como presidente de la junta de gobierno del congreso local, ambos se sienten hechos a mano y como si fueran parte de la realeza, a pesar de que a la primer provocación aseguran que son de la Cuarta T que se supone, es de izquierda.
Esa forma elitista de pensar de nuevos ricos los hace creer que todo lo que hacen, por muy intrascendente que sea, merece la atención de los paparazzis y las portadas de los medios informativos.
Como prueba de está delirante megalomanía está una selfie que Diana se tomó en la cual al fondo aparece la imagen del Andobas, cubriendo sus hermosas y envidiables lonjas de la panza con una enorme toalla, ostentando sus papadas dignas de un emperador romano sentado en una silla inclinada de una peluquería (o barbería como hoy les llaman) mientras un peluquero le cortaba el pelo.
En suma un hecho intrascendente pero que de acuerdo a lo que creen tanto Diana Deniss cómo el propio Andrés Velázquez, la ciudadanía los tiene que conocer porque como Dioses del Olimpo tuvieron la humildad de bajar a la tierra y acudir a una peluquería como cualquier mortal.
Por desgracia, la obsesión de protagonismo de Diana no se queda allí. Va más allá de tomar y compartir fotos mediocres de Velazquez haciendo lo que bien sabe hacer: es decir nada.
De acuerdo tanto a sus allegados como a los de su esposo Andrés Velázquez, Diana Deniss actúa con tal protagonismo en el congreso como si ella fuera la diputada, ya que no sólo regaña y amenaza de correr de manera humillante frente a otras personas a sus asistentes, como sí fueran sus servientes ,sino también trata mal a los asesores del Andobas, y hace lo mismo con los colaboradores de los otros legisladores de partidos de la Cuarta T.
Incluso aseguran, que doña Diana Deniss participa y mete su cuchara en las reuniones entre legisladores presididas por su marido como si fuera diputada, con la complacencia del Andobas.
Esta situación ya ha provocado muchas molestias de los legisladores del PT, Partido Verde y Nueva Alianza quienes , en los corrillos del Congreso de Hidalgo se quejan y lloran de que ya no aguantan las impertinencias y ocurrencias de Diana Deniss, pero que no se atreven a decirle nada a Velázquez porque temen que de inmediato se lo cuente a su esposa y que está le ordene vaya a acusarlos con el primer morenista del estado que despacha en el cuarto piso de un inmueble que se encuentra en Plaza Juárez de Pachuca.
Las impertinencias de Diana Deniss hacen creer que ella es algo así como una especie de diputada de facto por lo que el Andobas hace lo que ella le dicta. La única preocupación de Velázquez según estos legisladores es saber a que lugar va a ir los viernes de cada semana a echarse los tragos acostumbrados para "ponerse contento'.
En suma , el protagonismo,y el exhibicionismo al igual que su incapacidad, de nada le van a servir a Diana Deniss para alcanzar algún puesto público o ser nominada para alguna candidatura dentro de 3 años.
Diana Deniss debe dejar de hacer ocurrencias y optar optar por hacer lo mismo que sabe hacer muy bien su esposo Andrés Velázquez, es decir nada.Es decir ,mostrarse como una persona gris, sin chiste, y sin hacer ninguna aportación a la Cuarta T. Sólo así su marido obtuvo la diputación y la coordinación de los legisladores de Morena y de la 66 legislatura local, ya que para la dirigencia de Morena Hidalgo a cargo de Marco Rico Mercado, son el tipo de perfil idóneo para ostentar esos cargos.
