
3 de diciembre de 2025
El Senado de la República recibió formalmente la terna enviada por la presidenta Claudia Sheinbaum para ocupar la Fiscalía General de la República, integrada exclusivamente por mujeres: Maribel Bojórquez, Luz María Zarza y Ernestina Godoy. La confirmación llegó a través de la presidenta de la Mesa Directiva, Laura Itzel Castillo, quien informó que el Ejecutivo remitió el oficio con los nombres de las finalistas que competirán por el puesto que dejó vacío la renuncia de Alejandro Gertz Manero.
Que la terna sea completamente femenina no es un dato menor: el gobierno busca subrayar un relevo simbólico y político en una institución marcada por decisiones controvertidas, opacidad y una relación siempre compleja con el Ejecutivo. Pero el simbolismo no exime la responsabilidad. Cada una de las candidatas llega con una carga política distinta y con preguntas inevitables sobre su autonomía.
Maribel Bojórquez proviene de un perfil jurídico sólido aunque discreto; su independencia sería un tema a evaluar. Luz María Zarza representa una figura técnica dentro del aparato del Estado, con experiencia, pero también con vínculos cercanos al oficialismo. Y Ernestina Godoy—quizá el nombre más polémico de la terna—arriba con un historial de cercanía con Morena que ha generado dudas incluso entre sectores que apoyan la transformación del país. Su paso por la Fiscalía de la CDMX dejó debates abiertos sobre uso político de la institución, decisiones procesales controvertidas y un estilo de conducción que incomodó a más de un actor judicial.
La Comisión de Justicia del Senado deberá ahora revisar perfiles, trayectoria, independencia y viabilidad de cada propuesta. La pregunta de fondo no es técnica: es política. ¿Habrá un esfuerzo real por fortalecer la autonomía de la FGR o este relevo será, nuevamente, un movimiento para consolidar el control del gobierno sobre un órgano que constitucionalmente debe ser independiente?
El Senado tiene en sus manos una decisión que marcará la relación entre el Estado de derecho y el poder presidencial en los próximos años. La terna ya está sobre la mesa. El debate apenas comienza.